Como cristianos evangélicos, aceptamos la revelación de un Dios único en tres personas (Padre, Hijo y Espíritu Santo) tal como se presenta en las Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamento, y confesamos la fe histórica del Evangelio proclamada en sus páginas.
Creecer en nuestra fe es un viaje. Una vez que conocemos a Jesús, crecemos en relación con Él y luego animamos a otros a hacer lo mismo.
Todos estamos en el mismo camino, pero el viaje puede parecer diferente para cada uno de nosotros.
No importa dónde te encuentres, ¡hay un próximo paso que puedes dar!
El liderazgo de la Iglesia consiste en servir a los demás de acuerdo con los intereses de Cristo para que puedan ver y cumplir el propósito de Dios para ellos en el mundo.